El Grupo de Teatro Catalinas Sur se presentó este domingo 2 de noviembre en La Vieja Usina con su emblemática obra Venimos de muy lejos. La pieza, estrenada originalmente en 1990, reconstruye la historia de las migraciones y revisita los sueños y la lucha de quienes deben construir comunidad en medio de la adversidad.
La producción del encuentro en Paraná estuvo a cargo de nueve grupos comunitarios de arte, comunicación y cultura que, con trabajo autogestivo, hicieron posible la llegada de un elenco de ochenta personas y una escenografía que recreaba el conventillo, corazón de la obra.
Las puertas de la sala se abrieron pasadas las 20 y pronto el espacio se colmó de público de todas las edades. Antes de comenzar, las directoras Nora y Stella agradecieron a las organizaciones anfitrionas y compartieron la alegría de volver a encontrarse con una ciudad que siempre les recibe con afecto.
Al finalizar, los aplausos sostenidos dieron paso a un momento de reflexión. Lole Rodríguez, referente de la Biblioteca Popular Caminantes, fue invitado al escenario para extender el agradecimiento colectivo y celebrar el valor de las redes culturales que, desde distintos territorios, siguen apostando a construir juntas. En ese marco, invitó a las compañeras y compañeros de las organizaciones locales a sumarse al escenario, gesto que selló la unión entre el elenco visitante y quienes sostienen el arte comunitario en Paraná.
Entre abrazos y risas, elenco y público entonaron “la murguita del tornillo” y salieron juntos hacia la explanada de La Vieja Usina, donde el bombo y el canto sellaron la despedida.
Este domingo en Paraná se celebró una noche de comunidad, arte y memoria compartida que recordó que el teatro, cuando nace del pueblo, no se apaga.














